Hierba de trigo {Germinando en casa}

Últimamente veo muchas referencias en internet a los superalimentos, y entre ellos he descubierto la hierba de trigo, aprovechando que mi amiga Ana me mandó trigo ecológico lo puse a germinar en casa, tan sencillo como remojar, trasladar a un colador y seguir remojando y escurriendo unos días hasta que esté lista nuestra hierba.

El germinado de trigo (Wheatgrass): fuente extraordinaria de minerales como el magnesio, el calcio, el potasio, el azufre, el flúor, el silicio y el zinc, entre otros, y vitaminas como las vitaminas del grupo B, la C y la E. Su riqueza en magnesio le confiere propiedades relajantes de la musculatura y del sistema nervioso, y es ideal para mejorar la recuperación de los deportistas y para las personas con fatiga crónica. También regula los niveles de ansiedad, ya que contiene L-triptófano y L-fenilalanina. Se puede mezclar con fruta, o añadir a las cremas de verduras, por ejemplo. Información de “Ets el que menges”

Antes de que cosecharan los campos que hay frente a casa, salimos a recoger alguna espiga pero todavía no sabemos distinguir entre el trigo, la cebada y el centeno. El grano que recogimos era más alargado que el trigo que me había mandado Ana.

 Germinar hierba de trigo en casa

Dejamos en remojo los granos de trigo durante toda la noche, por la mañana los aclaramos y los ponemos sobre un colador grande que dejaremos sobre un bol o cacerola y que taparemos con un paño para preservar de la luz. Tres veces al día remojamos bajo el grifo y volvemos a dejar que escurra, de esta manera evitaremos que se pudra y también que se mantenga húmedo (como hace mucho calor el paño lo he mantenido húmedo los primeros días). En las imágenes podéis ver el proceso, en la primera el trigo remojado durante la noche, en la segunda la germinación dos días después. En este estado podemos comerlo como germinado o secarlo y partirlo para hacer bulgur para el tabulé. Si seguimos el proceso, la tercera imagen es del cuarto día, ya ha crecido la hierba, dejamos destapado para que pueda crecer y colorearse. Dos días más tarde nuestra hierba ya es verde y ha crecido lo suficiente, un día más y ya está lista para comer.

Batido de hierba de trigo, manzana y menta (para dos)

Una manzana, un buen puñado de hierba de trigo, unas hojitas de menta y un vaso de agua mineral o filtrada. Lo ponemos todo en la batidora y trituramos hasta que quede bien fino, la hierba de trigo es bastante fibrosa por lo que se necesitará añadir bastante agua, si un vaso no te parece suficiente ves añadiendo hasta conseguir la textura que más te guste. En cuanto al sabor, predomina el frescor de la menta recién cortada.

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