Muffins de tomate y mozarella

Pizza deconstruida, así llamaría Ferran Adria a lo que he hecho con la receta de hoy, ahhh, que más quisiera yo que saber hacer una deconstrucción como él, pero bueno, me hace ilusión llamar así a este muffin salado.

Para mi segunda incursión en la cocina de los muffins salados me he inspirado en el plato que más éxito tiene en mi casa, la pizza. He cogido los ingredientes base del bizcocho y le he añadido mozarella, tomate y orégano, casi una pizza, un muffin aromatizado con orégano y tomillo.

Hoy he utilizado dos tipos de harina, las dos de trigo, mitad refinada mitad integral para añadirle un aporte extra de fibra y además conseguir un color dorado muy apetecible. ¿Me acompañáis a la cocina?

Ingredientes:

100 gr de harina de trigo refinada

100 gr de harina integral

1 cucharada de bicarbonato sódico

1 huevo

60 gr de aceite de oliva

1 yogurt griego

100 gr de mozarella rallada

½ vaso de leche

Tomates cherry secos y frescos

Orégano, tomillo y sal

Elaboración:

En un bol ponemos el huevo, el yogurt, el aceite y una pizca de sal. Batimos bien e incorporamos la mozarella rallada, el orégano, el tomillo y los tomates secos cortados en trozos pequeños para que se repartan mejor, mezclamos bien y vamos incorporando poco a poco la mezcla de harinas y bicarbonato. Como la masa queda un poco compacta añadimos un poco de leche para aligerarla. Dejamos reposar.

Mientras reposa ponemos el horno a 180⁰ y engrasamos los moldes con un poco de aceite de oliva, hoy he usado moldes de loza para hacerlos, como son más grandes (los míos) que los de papel salen media docena de muffins. Rellenamos los moldes y ponemos en el centro de cada uno un tomate cherry entero, para que no se quedara escondido he utilizado tomatitos pera que son más alargados. Horneamos durante 20-25 minutos, hasta que estén dorados y listos. Servimos acompañados de una ensalada verde.