Mazapan de pistacho { Ventanas Verdes }

Hay meses que pasan volando y este ha sido uno de esos, no he llegado al reto de mis queridas Memòries d´una cuinera y casi me despisto del reto de Ventanas verdes del mes. Que cabecita tengo a veces bufff. El reto de este mes es frutos secos Ñam ñam

Al pensar en frutos secos en seguida me viene a la cabeza la repostería árabe, y eso que no soy nada golosa. Como se trata de un reto de Ventanas verdes y como tal siempre intentamos incorporar productos de proximidad, por este motivo he utilizado miel de la alcarria para mi receta en lugar de otros endulzantes con índice glucémico menor. Puedes sustituirla por sirope pero ya sabes que cada uno tiene un sabor y la repostería árabe me sabe a miel, a miel y a frutos secos, y especias ¡claro!

En fín, que lo que se me ha ocurrido es preparar mazapán de pistachos y miel. Después lo he utilizado para rellenar un poco de pasta filo y acompañarlo con un poco de mandarina. ¿El resultado? Que voy a decir yo que lo he hecho jeje ¡para chuparse los dedos!!!

Antes de dejaros con la receta ¿verdad que son bonitas las flores que trajo mi amiga Eli? Ya están un poco chuchurrías pero a la receta llegaron frescas ;)

Mazapan de pistacho y miel

125gr de pistachos crudos pelados

75 gr de miel (cucharada y  media)

El zumo de medio limón (25 gr)

40 gr de agua

1 cucharadita de agua de azahar

½ cucharadita de canela molida

4 hojas de pasta filo

1 mandarina

Elaboración:

Si queremos que los pistachos tengan un color verde intenso, es aconsejable escaldar durante un minuto y cortar la cocción sumergiéndolos en agua fría, pelamos la piel fina que los recubre. Una vez pelados (si no te importa el color puedes saltarte ese paso) los doramos ligeramente en una sartén antiadherente, un par de minutos, para que tengan sabor a tostado.

Ponemos los pistachos en el molinillo de café para conseguir harina de pistacho, no hace falta que queda muy fina. En un bol mezclamos los pistachos molidos con la miel, el zumo y el agua. Incorporamos el agua de azahar y la canela. Mezclamos bien, queda una masa blandita. La ponemos en plástico de cocina y la ponemos en el refrigerador hasta el día siguiente. Por la mañana hacemos rollitos de hojas filo con el mazapán de pistacho en el centro. Yo utilicé la esterilla del sushi para ayudarme. Pones dos hojas juntas en cada rollo, el relleno en el centro y a enrollar. Salen dos rollos del tamaño de la esterilla de sushi. Lo dejamos media hora en el congelador para que resulte más fácil cortar las porciones.

Mientras precalentamos el horno a 180° Una vez estén fríos los rollos, cortamos en porciones individuales. Los ponemos en la bandeja del horno y pulverizamos un poco de aceite de oliva para que se dore la pasta filo. Los tendremos en el horno unos 10 minutos o hasta que esté dorada la pasta.

Para emplatar, acompañaremos cada rollito con un gajo de mandarina y un poquitín de miel por encima. El contraste del crujiente y dulce postre con la mandarina está muy bueno. Tienes que probarlo!!!

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