Hoy he sacado un ratito para
hacer un par de fotos al plato que nos íbamos a comer, no quería saltarme el
reto de Memòries d´una cuinera, que era preparar un plato de albóndigas. Las mías
versión veg ¡claro!
En casa la verdura favorita de
los chicos es el brécol, por eso pensé que unas albóndigas hechas con este
vegetal tendrían éxito pero la verdad es que me ha tocado sacar la salsa de
tomate (milagrosa salsa que soluciona todo) para que se las comieran con gusto.
Y que conste que ricas estaban pero es que los chicos y la verdura… salvo en
puré, así se comen todo lo que quiera ;)
Albóndigas veganas
de brécol y patata
1 brécol pequeño
2 patatas medianas
1 cebolla tierna
1 zanahoria
1 cucharada de salsa de soja
1 cucharada de salsa de tomate
½ vaso de leche de almendra
Nuez moscada, aceite de oliva y pimienta
Copos de trigo sarraceno (o de avena si no tienes)
Elaboración:
Ponemos a cocer las patatas.
Mientras picamos la cebolla y la zanahoria en la picadora, ponemos un par de
cucharadas de aceite en la sartén y las pochamos. Cuando estén listas
incorporamos el brécol picado (también con ayuda de la picadora, sin tronco).
Cocinamos un par de minutos, incorporamos un poco de nuez moscada y pimienta
molida, añadimos la salsa de soja y la de tomate, removemos y retiramos del
fuego.
Ponemos en un bol la verdura y
las patatas sin piel, con ayuda de la varilla de mano vamos chafando la patata
y mezclándola con el brécol. En cuanto deje de quemar vamos dando forma de
pequeñas pelotas a la masa, las rebozamos con los copos del cereal elegido.
Reservamos una taza de la masa. Ponemos aceite en una sartén y cuando empiece a
humear (170°)
vamos friendo las albóndigas por tandas, las dejamos escurrir en papel de
cocina. Puedes hornearlas si lo prefieres pero no las tengas mucho tiempo, 15
minutos a 180° serán suficiente porque si no se ablandan y pierden la
forma.
Con la masa que hemos dejado reservada
vamos a hacer la salsa, para ello solo tenemos que ponerla en el vaso de la
batidora junto a ½ taza de leche de almendra u otra a tu gusto, batimos bien
hasta que quede lisa. La ponemos en un cazo y cocemos un minuto. Disponemos las
albóndigas calientes en el plato, napamos con un poco de la salsa y acompañamos
con unos germinados y alguna hoja verde a nuestro gusto. Se pueden acompañar con salsa de tomate o salsa de soja :)
♥
Yo suelo hacer albóndigas veganas con berenjena de base, pero con lo que me gusta el brócoli me apunto ya tu receta porque tiene que estar deliciosa!
ResponderEliminarUn abrazo
No he probado a poner berenjena ¿tienes la receta en el blog? =)
EliminarYo suelo hacerlas aplastaditas (con forma de hamburguesa) con brecol, zanahoria y berenjena ¡y con la thermomix (que soy vaga!). Suelo acompañarla con salsa de yogurt (como la del kebaba) o tzatziki (una salsa a base de yogurt y pepino). Mmmmmm.... me está entrando hambre, Heva!!! Probaré esta nueva receta, seguro!!
ResponderEliminarYo tambien suelo darles forma aplastada porque se cocinan mejor y las puedes hacer a la plancha ;) Probaré tus ideas, suenan deliciosas!!!
EliminarMola! apuntadas queda, el otro día le decía a Lucía que había hecho hamburguesas con acelga, pero que había tenido el problema al asarlas a la plancha que se me desmontaban un poco, ella me confío el "secreto" con el lino, así que ahora ya no hay quien me pare, a experimentar con hamburguesas y albóndigas veganas, que vistas las tuyas quedan y saben deliciosas.
ResponderEliminarBesitos
En estas no hace falta el lino, la patata cocina con su piel conserva todo su almidon y este hace de pegamento ;) ¿con acelgas? habrá que probar =)
EliminarMe ha encantado esta receta y la voy a probar seguro. Estoy comenzando a andar en este mundo "veg", convenciendo a los míos, y creo que este plato les gustará. Y las fotos son realmente inspiradoras, a mí me hablan de un estilo de vida que aprecio mucho, más sencillo, más natural, menos artificioso. A veces las fotos tienen el don de convertirse en metáfora, y en tu caso sucede a menudo. Y esa preciosa jarrita, que no sé si es obra de ceramista pero en tu foto así lo parece -y no de uno cualquiera, de uno bueno y delicado- hace pensar en aquellos tiempos de William Morris. Una entrada llena de encanto. Un beso.
ResponderEliminarGracias Fernanda por tus palabras ♥
EliminarLa jarrita no es de ceramista, hay post en los que saco objetos que sí lo son, incluso algunos hechos por mi, pero los de hoy no lo son.
Un besote!!!
Pues nada, la próxima vez no saques la salsa de tomate, me las como yo!:DDDD
ResponderEliminarBesos y muchísimas gracias por participar.
Gracias a ti mi Moni!!!
EliminarHola! pues yo ayer tarde hice unas con coliflor, almendras y queso. Tambien llevan huevo, asi que no son veganas. Las meto al horno en vez de freirlas. Estan ricas. La receta original es con brocoli, del Bolg Bocados de cielo ;)
ResponderEliminarHola Elisa, estas están preparadas de las dos maneras, fritas y al horno y no se aprecia la diferencia ;)
EliminarQué buenas Heva, gracias por compartir
ResponderEliminarGracias a ti Jetsa =)
Eliminartan original y alternativa como siempre! eres una crack. Muchas gracias por participar. besos
ResponderEliminaroriginal propuesta!!! no te conocia, ya nos iremos viendo!!
ResponderEliminarSe agradecen recetas tan deliciosas como ésta, cuando empiezas a buscar alternativas para rebajar la ingesta de carne. Además se pueden hacer fritas o al horno! Genial! Muchas gracias por compartir! Un saludo!
ResponderEliminar