La primera vez que compré queso provolone lo hice porque el fabricante había puesto una etiqueta en la que se veía el queso cocinado a la plancha y aromatizado con hiervas, ummm, vamos que no me pude resistir, me lo lleve a casa.
Pero o yo no supe darle el punto o el queso a la plancha no es lo que yo esperaba, asique cuando vi en la carta del restaurante Provolone al horno, me dije, vamos a darle otra oportunidad, pero esta vez al horno. Nos lo sirvieron acompañado de unas tostadas y unas rebanadas de focaccia.
Ingredientes:
250 gr de harina
6 gr de levadura fresca
120 ml de agua
25 ml de aceite de oliva
Sal fina y gorda
Tomates secos
Romero picado
Queso provolone
Salsa de tomate casera
Orégano y tomillo
Elaboración:
En un cuenco ponemos la harina, sal al gusto y el aceite, disolvemos la levadura en el agua tibia y vamos incorporando y mezclando. Sacamos la masa del cuenco y empezamos a trabajarla, cuando vaya siendo maleable le añadimos el tomate finamente troceado (antes lo habremos reidratado para que se deshaga y tiña el pan) y el romero picado. Trabajamos hasta que estén bien integrados todos los ingredientes y nos quede una masa elástica. Dejamos reposar tapada con plástico de cocina hasta que doble su volumen.
Una vez reposada la volvemos a poner en la superficie de trabajo y la estiramos, formando un pan de 1,5 cm de grosor, con el dedo vamos presionando la superficie para dejarle hendiduras a distancia más o menos regular, pincelamos la superficie con un poco de aceite de oliva y espolvoreamos con sal gorda. Introducimos en el horno a 220⁰ durante 15 minutos o hasta que se dore.
Mientras ponemos la salsa de tomate en el fondo de nuestros moldes para horno y ponemos sobre ella el queso, espolvoreamos con orégano y tomillo. Introducimos en el horno hasta que se funda el queso.
Servimos el queso junto a nuestra focaccia cortada en porciones y una cuchara para ayudarse. Lo preparé para merendar y solo nos quedó un poco de focaccia para acompañar la cena.
Pues a mi me pasó más o menos lo mismo que a ti con este queso, pero no le he dado ninguna otra oportunidad! Tendré que hacerlo! ^.^ Y esta combinacion con este pan delicioso tiene que estar buenisimo!! Besos
ResponderEliminarMmmm, lo estoy oliendo desde aquí, mmmm
ResponderEliminarEspectacular!!!!
ResponderEliminarNo sñe con qué me quedaría si con el provolone o más con la focaccia, porque ambos tienen una pinta... deliciosa!
ResponderEliminarBesos
Mmmmmm, cómo me gusta lo que nos traes hoy, Eva, la focaccia, el provolone, el romero, me encanta!!!!!
ResponderEliminarPreciosas las fotos!!!!
Madre mia que rico Eva!!!! Con lo que me gusta el provolone. Lo suelo comer en un restaurante argentino que lo preparan a la parrilla con hierbas aromàticas. Tendré que probar tu receta, se ve de lujo, uhmmmm!!!!
ResponderEliminarEva hija que rico te han quedado. Todavia no los hice en casa pero viendo estos tuyos a ver si este fin de semana me pongo con ello. Por cierto las fotos de hoy una pasada. Me gustan mucho. Bss
ResponderEliminarExquisito Eva, tengo que probarlo ya mismo.
ResponderEliminarBesos
Jo, Eva, qué bueno!!!! Me encanta el provolone a la plancha (hay quien lo neharina ligeramente), con ella muy, muy caliente y casi vuelta y vuelta, pero hace años que no lo preparo. Y así al horno, con ese tomatito y una focaccia casera, tiene que estar de muerte lenta. ¡¡Qué bueno!! No me xtraña nada que no quedase para la cena.
ResponderEliminarBesos.
Ya he llegado, por fin!! Se me hace raro llegar tan tarde. Me encantan tus fotos, hoy en especial, tienen el calor del hogar, del pan recién hecho, el olor del orégano...me gustan y mucho. Y la receta amiga, soy ratona como tu, y el provolone me lo como hasta a bocados, asi que esta cae seguro. Bss
ResponderEliminarEsta entrada me ha encantado. Todo delicioso! Hace tiempo que no pruebo el provolone. Antes lo hacía al horno con especias por encima. Bss
ResponderEliminarMe la apunto para hacerla, que tiene muy buena pinta!!!
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